Cuando se habla en público es necesario tomar conciencia de nuestros
gestos, ademanes e inflexiones, para lograr que nuestra audiencia se sienta a gusto.
Muchas veces necesitamos agregar pequeños cambios en nuestra
forma de comunicar, con el objetivo definido de lograr mayor impacto e
inmediatos resultados.
Se viven momentos de transformación en nuestras presentaciones. Hoy se acuñó el término muerte por powerpoint, para hacer referencia ese fenómeno de cansancio que le causamos al público.
Debemos ser sinceros: aburrir a la audiencia es lo fácil. No aburrir es el gran reto. Pero surgen las preguntas ¿cómo lograrlo? ¿qué debemos hacer para marcar la diferencia?
Debemos ser sinceros: aburrir a la audiencia es lo fácil. No aburrir es el gran reto. Pero surgen las preguntas ¿cómo lograrlo? ¿qué debemos hacer para marcar la diferencia?
Te comparto
algunas recomendaciones, que debes tomar en consideración si deseas comunicar
con productividad.
Créete el experto. En las jornadas de formación que imparto, es el
primer consejo que doy, aclarando que no estoy pidiendo que des una imagen
falsa sobre ti. El consejo tiene que ver con la afirmación que hago en un
artículo anterior, se trata de tener confianza en
nuestras capacidades y limitaciones, lo que nos permite reconocer nuestra
singularidad.
Céntrate en las
personas. Habla en función de las
personas y sus necesidades, no del tema. Para ello es importante la lectura
constante de los gestos y expresiones del público. Cuando nos centramos en las
personas podemos lograr empatizar, de lo contrario podremos lograr que el
público diga “sabe del tema, pero no entendí nada”.
Habla sobre la
utilidad. Este consejo va ligado al anterior,
porque se trata de que incluyas la utilidad de tu mensaje en la presentación.
Es fácil dar conceptos y definiciones tecnocientíficas, pero eso se consigue en
la web. Debemos hacerles ver a las personas cual es la utilidad de lo que
estamos contando, para ello puedes identificar una historia de algún famoso o
citar datos estadísticos que aporten valor humano y permitan posicionar el
tema.
Sonríe. Este último punto
podría ser el primero. Afirma Brenda Ferreira que “la sonrisa es uno de los rasgos que hace
diferentes a las personas” porque somos el único animal que muestra los dientes
y no es para pelear. Sonreír durante la presentación nos hace ver más cercanos al público, con ello logramos vencer barreras de prejuicios y estados emocionales, porque “cuando le sonríes al mundo,
el mundo te da una sonrisa de vuelta”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario