En el arte de hablar
en público es necesario la revisión y la rectificación constante, ya sean de
gestos, ideas o expresiones, porque podemos caer un círculo vicioso que no nos permita
avanzar.
En el presente artículo
deseo que revisemos algunas expresiones que de forma común son repetidas por profesionales,
cuya responsabilidad de hablar en público es constante, las cuales se vuelven
anclas que no permiten el crecimiento artístico en la oratoria.
1ro. Disculpen estoy algo nervioso,
porque no me dio tiempo de prepararme bien. Iniciar cualquier
intervención exponiendo nuestras debilidades o irresponsabilidades lleva al
público a cierta predisposición o rechazo, situación que puede resultar
contraproducente para lograr el objetivo que hayamos definido.
2do. El tema que
sigue lo voy a omitir. Esta es una forma muy lamentable de manifestar
ante un auditorio que no sabemos lo que estamos haciendo. Si exponer nuestras debilidades
condiciona, afirmar que se va a omitir un contenido distancia, porque resta
profesionalismo al orador.
3ro. Perdonen, pero
esto si es importante. Imagina que durante
90 minutos te has dirigido ante el auditorio y en ese momento digas “perdonen, pero esto si es importante”. La
pregunta que nos hacemos como público es “¿significa
que todo lo anterior no era importante?”. Qué consideras puede ser el
pensamiento colectivo del público. Cómo crees que reaccionarias tú, de ser parte
del público presente. Recuerda que evitar
alejar al público ya es ganar mucho terreno.
4to. Si yo fuera usted,
aplaudiría por tan hermosa idea. Recuerdo que esto nos
pasó en la ciudad de Guanare (Venezuela). Una de las conferenciantes pedía al
público que aplaudiera cuando presentaba sus ideas y como no lo hacíamos al unísono
nos increpaba. En el receso una de las profesionales presentes se me acercó y
me preguntó a quemarropa si eso era o no correcto. La verdad es que no
respondí, utilice una técnica de rebote para responder y esa persona se fue con
su respuesta, evité así caer en el error de quemar a la conferenciante. Lo que te debo advertir es que las expresiones
de agradecimiento o felicitaciones no se piden, ni se exigen, se conquistan en
el escenario.
5to. Gracias por la
oportunidad, les prometo que seré breve. Si
la intención es ser breve, hazlo, pero no se lo prometas al público, porque con
ello quitas valor al discurso, aunque la intención sea de captar la atención, la verdad es que no beneficia en nada al
decirlo, es mejor recurrir a otras técnicas de inicio: fraseológica, estadística,
preguntas, entre otras, para lograr la atención requerida.
Ya sabes, para
ir en crecimiento como artistas debemos revisarnos constantemente, eso no significa
que no podamos cometer errores, lo que significa es que de cometerlos, tenemos
la responsabilidad de corregirlos.
En el arte de hablar en público es necesario la revisión y la rectificación constante, ya sean de gestos, ideas o expresiones, porque podemos caer un círculo vicioso que no nos permita avanzar.